jueves, 24 de noviembre de 2011

Dormir sin dinero II: alojamiento a cambio de trabajo

Otra opción a la hora de viajar sin dinero es evidente: dar algo a cambio. Hay múltiples formas de obtener alojamiento y comida ofreciéndote a trabajar en diferentes ámbitos.
Siguiendo ese modelo se crea la red internacional WWOOF: alojamiento gratis en granjas ecológicas a cambio de voluntariado.

Foto: Comprock en una granja ecológica
WWOOF (World Wide Opportunities on Organic Farms) se presenta como una alternativa para aquellos que en lugar de ver monumentos prefieren experimentar y sumergirse en la naturaleza. A través de su página web se puede contactar con granjeros de todo el mundo que ofrecen alojamiento y comida a cambio de unas tasas específicas, que nunca es dinero, sino horas de trabajo. Por poner un ejemplo, un granjero en Australia puede ofrecer cuatro plazas durante siete días a cambio de cuatro horas diarias de voluntariado en las tareas de la granja.


jueves, 17 de noviembre de 2011

Dormir sin dinero I: intercambio de habitaciones

Si se emprende la aventura de viajar con los bolsillos vacíos, llega un momento crucial en el que se debe decidir dónde pasar la noche.
En casos extremos, los aeropuertos o las estaciones de tren suelen ser una opción a considerar, ya que en teoría uno no debería encontrar trabas por pasar una noche en estos espacios públicos. Sin embargo, los viajeros de todo el mundo se han organizado para crear redes de solidaridad como Hospitality Club o couchsurfing, que aunque a priori son buenas ideas, no dejan de tener sus riesgos.

Logo de Hospitality Club
Hospitality Club es una red mundial que funciona a través de Internet y cuyo objetivo es poner en contacto a personas de diferentes ciudades que están interesadas en alojar a viajeros en sus casas, y a su vez en recibir alojamiento en otros países, de forma completamente gratuita.
Se forma íntegramente por voluntarios que buscan el intercambio cultural y la experiencia de viajar de forma no turística.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

La crisis del euro es una realidad

La crisis del euro que tanto se temía está cada vez más cerca y la sociedad menos enterada sobre lo que ocurre. ¿Cómo se ha llegado a esta situación? ¿Qué va a ocurrir ahora? ¿Qué consecuencias puede tener?

Podemos fijar el inicio de esta historia en las agencias de calificación Standard&Poor's, Moody's y Fitch, de Estados Unidos, cuando bajaron la nota de Grecia, Portugal y España, lo que provocó las decisiones económicas de subir los tipos de interés, retirar inversiones... Es decir, empezaba un círculo vicioso que tiene difíciles salidas.

La solución que encontró Europa fue formar dos fondos de intervención. El Eurogrupo (formado por los ministros de economía de los países miembros) ha invertido 750.000 millones de euros en ayudas para los países más afectados. El fondo se compone del dinero aportado por países de la Eurozona, el FMI y los préstamos europeos garantizados por el presupuesto de la Unión Europea.
El problema es que, gracias a este fondo, Europa depende estrechamente del FMI, lo que terminará empobreciendo aún más a los países que ahora necesitan ser ayudados.

Los países están muy vigilados y presionados para conseguir rebajar su deuda por debajo del 60% del PIB, de otro modo serán multados o sometidos a otros procedimientos.

A pesar de la mucha información que tenemos de la crisis del euro, lo cierto es que nadie sabe muy bien cómo ni cuándo acabará.

En esta gráfica se puede ver la caída considerable que ha sufrido el PIB, el empleo y la inflación en España como representantes de la economía del país.


La crisis del euro

La crisis del euro consiste en la pérdida de valor de la moneda europea, debido a ciertos hechos que han afectado negativamente a la Unión Europea.
Esta crisis comenzó a finales del 2009, cuando empezaron a escucharse rumores sobre que la deuda griega era demasiado elevada, por lo que era posible que se produjese una cesación de pagos. Todo esto se agravó cuando la crisis mundial llegó a Europa, por lo que  el déficit presupuestario subió, y los intereses necesarios para prestar dinero a Grecia se incrementaron.
Esto hizo que todos los países de la eurozona fueran afectados de forma colateral por esta crisis griega. Por eso, la economía de los países europeos menos estables a estos niveles (Portugal, España, Irlanda e Italia) comenzó a tambalearse.

En octubre de 2010, el Fondo Monetario Internacional decidió tomar medidas para el rescate de la economía griega (aunque fue bloqueado durante bastante tiempo debido al desacuerdo de Alemania, con una economía líder en la UE)
El 2 de mayo de 2011, finalmente el FMI acordó un plan de rescate de 750.000 millones de euros, para hacer que esta crisis dejase de extenderse a lo largo de todo el continente. Además, el 10 de mayo se acordó crear un fondo de estabilización colectivo para la eurozona.
Por último, además de todas estas medidas de ajuste, los países miembro de la Unión Europea han tenido que tomar severas medidas de ahorro para tratar de solventar esta crisis.

Todos estos hechos han hecho que el valor del euro se tambalease respecto al del dólar, como se muestra en el siguiente gráfico.